Las plantas, como los animales, necesitan alimentarse y respirar para crecer y sobrevivir.
La respiración de las plantas es como la de los animales: toman del aire oxígeno y expulsan el gas dióxido de carbono.
La alimentación de las plantas es muy diferente de la de los animales. Las plantas no necesitan buscar su alimento como hacen los animales, sino que lo fabrican ellas mismas. Para ello necesitan aire, agua, algunas sustancias que hay en el suelo y la luz del sol.
La alimentación de las plantas comprende tres fases:
- absorción de agua por la raíz
- fabricación de la savia elaborada
- reparto de la savia elaborada por toda la planta
Estas tres fases se producen constantemente.
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